Monday, June 25, 2012

Yo estoy al derecho dado vuelta estás vos.

Partamos por decir que hablar de las cosas diciendo que son de “verdad” sea la salud, la masculinidad, lo femenino versus lo camionero, o lo políticamente correcto versus lo que realmente estás pensando y no puedes decir, son quiéralo uno o no, formas de control. Da lo mismo que las ideas calcen o no con lo que hay que pensar para estar actualizado. Una vez un gran profesor que tuve me ayudó a entender el análisis de los discursos de la siguiente forma: “siempre hay alguien a quién desfavorecen y siempre hay una construcción de mundo a la que favorecen”. A quién favorece la idea de que hay esencias verdaderas y otras más deficientes ya lo sabemos. Conocemos bastante bien ese concepto de que al dolor hay que darle la bienvenida haciendo lo posible por individualizarlo y que deje de ser un problema por ejemplo a veces social. Estas esencias del hombre y la mujer verdadera, sólo sirven para establecer un orden común y una desviación a la norma, creyendo que la verdad no favorece ningún estado de cosas sino que tiene que ver con la “realidad misma”. Pensemos por ejemplo en que la homosexualidad era una enfermedad egodistónica para uno de los manuales más consultados en el mundo (DSM) en temas de enfermedades mentales hasta 1971 o que la locura era una posesión demoníaca hasta la entrada la modernidad. Pensemos que sin la idea de la “inteligencia emocional” o la cultivación del lado “femenino” no existiría el concepto “metrosexual”. Pensemos también en que tanto la idea de un hombre más “emocional” y la construcción de una mujer independiente y empoderada con más tiempo libre hay también detrás una idea de que la sociedad de consumo actual también necesita crear cada vez más y nuevos deseos. Es así como surgen nuevas formas de cultivar tanto el intelecto como el alma, pero no nos engañemos creyendo que esto son esencias dadas de antemano o que están situadas en el “alma”. Cuando una lavadora lava más y en tres veces menos de tiempo y un comercial te dice que eso le permitirá a la mujer más tiempo con “los suyos” no te está dando más libertad. No está cambiando los roles asignados socialmente a hombres y mujeres. Cuando te dicen que después de trabajar todo el día, vayas a “darte un gusto” no te están haciendo más individual sino que están reciclando nuevas formas de consumo. Podría seguir escribiendo horas sobre esto pero hoy sólo quiero decirles a las empoderadas o empoderados de blogs, que siguen creando esencialidades como el “hombre” o la “mujer” de verdad y encima auspiciados por marcas, que a mí no me la van a vender. Son un eslabon más del sistema como tod@s, la diferencia es que algun@s tenemos un poco más de autocrítica.

Saturday, June 23, 2012

Goebbels en la ciclovía

Lo de la asesora de Piñera me ha hecho pensar en un par de cosas. La primera es que alguien que gana casi 3 millones al mes asesorando, pueda cometer un error tan pero tan estúpido. Lo segundo es cómo llegó a ese lugar para cometer semejante estupidez. Veo su CV y estudió en la UC y antes en el Villa María y pienso en la cantidad de amigos que tengo que harían mil veces mejor esa pega. Luego descuento a los que no trabajarían para Piñera ni cagando y me queda un 10% que suelen ser esos obsesivos que con tal de hacer bien las cosas trabajarían hasta con Goebells. Después pienso en que ni esos que trabajarían con Piñera y son mis amigos serían contratados. Ese 10% probablemente le hablaría a la cara y le diría que un presidente tiene que hacerse cargo de la realidad sea cual sea y que tapar una cámara y que siga siendo tabú hablar de Pinochet no será jamás el camino correcto. Le dirían probablemente que si hace eso, se parecerá demasiado a ese ex que dice que su ex ya es pasado pero tartamudea al hablar de ella. Le dirían que no poder hablar de algo de esa manera tan histérica, transforma eso que dices que es pasado en algo demasiado presente. Tenemos el presidente que nos merecemos. Eso está clarísimo. También tenemos un Chile que a veces se hace mejor en las barras de los bares o en ese hueón al que le abres una puerta y te dice gracias. Tenemos ese país en el que te sorprende que alguien te diga gracias. La otra vez a una señora se le cayó el carro entero de la feria y se lo levanté entero., fruta por fruta, coliflor por coliflor y no sólo no dijo Gracias sino que ni me miró a la cara. Es probable que en su cabeza haya pensado que el mundo le debe todo o que por ser más vieja, se lo merecía. O tal vez pensó que los demás le deben algo de antemano. No tengo idea pero sí sé que ese me parece un mundo de mierda. También me parece una mierda ver a tanta gente con tantos huevos y tan pocos contactos que la pasan peor que muchos giles que se sacan fotos mostrando lo felices que son. Y que se rodean de otros aún más giles que les dicen día a día lo talentosos que son. Yo nací y viví 20 años fuera de Chile y me da una pena enorme que algunos hueones me vengan a hablar de memoria o historia cuando no son ni capaces de asumir que si no hubieran convertido a Violeta Parra en un ícono turístico la pescarían mil veces menos. Si a Radrigan no le hubieran dado el premio nacional de las artes, seguiría en la pobreza misma. 25 años de alguien llamado Don Francisco ni sirve para pensar en lo que la ideología del DON ayudó al patronazgo y al fundo. Los conserjes del edificio donde tengo mi consulta me saludan siempre diciendo: Hola Don Pablo. Y siempre me pregunto que hice para que me llamen así. ¿y saben lo que hice? Tuve la gracia de nacer en otro lugar que ellos y que su pega dependa de mí. Tengo el Don de haber estudiado y de que a veces me digan Doctor. Pero por lo menos me la pienso cada vez que subo al ascensor. Y tengo siempre clara la diferencia maricona que me pone a mí en un lugar y a ellos en otro. Por eso mismo quiero reírme ahora de los Ligurianos que son amigos de los mozos que los atienden y que sienten que cuando los tutean están del lado del pueblo. Me dan tanta risa hueones que tengo miedo de que me dé hipo. Van a la Moneda porque creen que en un almuerzo cambiarán el mundo. Se sienten del lado de “la gente” cuando no son ni capaces de aceptar una crítica. Esa misma que la gente “común” soporta día a día sin más elecciones posibles que la vida que tiene. Y aún así, siguen creyéndose la raja y financiando sus faltas de sinapsis inventando un nuevo enemigo. Chapoteando en sus placeres culpables creyendo que están ayudando al mundo. Puta hueones, si por lo menos hicieran algo nuevo. Si no plagiaran a otros o por último no se copiaran a sí mismos, vaya y pase. Pero creo seriamente que si a uds les va bien en la mediocridad en la que nadan, es porque viven en un mundo de juguete. Están aliados al poder y eso les sirve para creerse importantes. Quiero que sepan que los critico no por envidia sino por ser tan mediocres con las posibilidades que tienen de ser un poco menos pelotudos. Son pelotudos armados que creen que andar más en bicicleta cambiará el mundo. Mientras se hacen más ciclovías ustedes se casan con las hijas de sus futuros jefes, son unos tiernos. Nunca he comprado un peluche pero a ustedes les tengo una fábrica entera.

Thursday, June 14, 2012

Yonlu: Tan chico y tan gigante

Tenía como 3 ideas para esta tercera columna y todas eran sobre grupos a los que les debes tanto que te cuesta distinguir entre tu sangre y la ajena. De esos que te han seguido en tu historia peor que una garrapata a un perro de verano. American music club, bitter springs y silver jews eran las posibilidades a elegir si es que no me hubiera enterado de que luaka bop(sello de David byrne) editó el disco recopilatorio de Yoñlu(Nick name de Vinicius Gageiro Marques). Así que esta tercera oportunidad se tratará de uno de esos discos llamados compilatorios que más que una suma de grandes éxitos, son una especie de testamento de lo que quedó después del terremoto. Yoñlu nunca editó ni dio a conocer ninguna de sus canciones y se suicida a los 17 años dejando un disco duro repleto de temas que encuentran sus padres cuando la policía revisa su computador. Es difícil no caer en el endiosamiento de la figura del genio incomprendido encerrado entre 4 paredes que paga con su vida el don y el defecto de su hipersensibilidad. Al estilo de un Cristo al que le debemos haber muerto por nosotros. A ese al que le debemos haber cruzado una puerta que nosotros no nos animamos a pasar. La muerte, el silencio y la locura suelen hacerse sinónimos a veces para describir el costo que tuvieron que pagar para crear lo que crearon. Por esta y otras razones suelen sobrevalorarse sus legados como si le estuviéramos debiendo algo o como si hubiera que escarbar hasta el hartazgo, porque tal vez son tan profundos que los equivocados somos nosotros porque no supimos escuchar lo que nos estaban diciendo. Linda Jones, hendrix, Cobain, Buckley, Elliot Smith y muchos más, empiezan a ser interpretados hasta el cansancio, mil veces más que cuando estaban vivos, y aunque tal vez ya lo sabían antes de morir, ya no tienen que sufrir la presencia de todo lo que se dice de ellos. La idea de lo que podrían haberle dado al mundo si siguieran vivos suele ser bastante idiota porque hasta el carnicero de la esquina que murió desangrado por equivocarse entre su brazo y la pata de un cerdo, también podría haber sido un genio de repente. Lo más difícil de escuchar cosas como las que dejó Yoñlu, es que más allá de que a veces no podamos rehuir de pensar qué pasaba por su cabeza, es de esa gente que te secuestra a su mundo y no te deja salir ni aún terminado el disco. No es ni un mimo ni un ventrílocuo ni es forrest gump pero Hay discos como este” “A Society In Which No Tear Is Shed Is Inconceivably Mediocre” (2009) que hacen estéril o idiota andar buscando en las canciones las razones de su muerte, como si hubiera que estar invocando al diablo tocando hasta los discos al revés para que ese descenso del otro al infierno tuviera que ser explicado. Razones para la lucidez, razones para el aislamiento, razones para tanta genialidad precoz y millones de razones que sólo necesitan los que escuchan o los sobrevivientes y en este caso es aún peor, porque las canciones que escuchamos no sabemos si querían ser compartidas por lo que haber podido escucharlas se parece bastante al voyeurismo. Es más una necesidad de los padres de que su muerte tenga en algún lado un mínimo sentido que alguien que realmente haya querido salir de su pieza. Yoñlu mezcla acá todo de una manera asesina y hace de las referencias algo interno que las transforma en algo totalmente nuevo. Él se suicida pero no sin antes hacer nacer todo otra vez.