Monday, December 31, 2007

irreemplazable

siempre acampa

siempre acampa

Friday, December 28, 2007

un año mas



¿Quién fue el idiota que dijo que lo nuevo se mide en años?
O si ya nos damos por vencidos, ¿Quién fue el genio que hizo que los que miden lo nuevo en días o minutos estén en el psiquiátrico?
¿No nos basta ya con festejar los días del padre, de la madre o de la secretaria que tenemos que encima festejar por la suma de cada uno de esos días?
¿Eso quiere decir que si no hay día del jefe es porque ese jefe lo es de todos los otros días restantes?
¿Es necesaria una medición anual para creer que el próximo año de la secretaria no será igual que el anterior?
¿Qué diferencia el día de la secretaria del 2007 de la del 2008?
¿Y por qué en Chile se celebra el 3 de Dic y en Argentina el 4 de Septiembre?
¿por qué si uno busca día de la secretaria en Google lo que más sale son páginas de empresas que venden flores?
Y tengo una última pregunta al respecto.
¿Por qué ciertas mujeres se sienten felices de festejar “el día de la mujer”?
Propongo entonces, que para que los heterosexuales y los hombres no se sientan discriminados, se cree el “día del hombre” y “el día del heterosexual”.
Si cada vez más nos encontramos con la obligación de lo nuevo ya no anualmente sino diariamente ¿qué es lo que festejamos al medirlo en 365 días?
Ya no podemos ir toda la semana con la misma ropa a la pega ni menos renovar nuestro vestuario una vez al año.
No podemos tener siempre la misma personalidad porque eso te hace retrógrado.
¿Si cambiamos a veces el celular 3 veces al año cuál es la razón de que lo nuevo viene con el año?
Si realmente la proactividad es una virtud actual entonces habría que festejar por lo menos mes a mes.
Si Internet informa minuto a minuto, incluso el diario de mañana ya se hizo viejo.
Y si esto es así en un resumen exageradamente criminal, ¿por qué mierda seguimos festejando un año nuevo?
Hay que ser idiota para no saber que ya casi nada se puede medir en años.
Tenemos libros que explican los cambios de un niño entre los 4 y los 7 meses.
Afeitadoras que conservan la afeitada 4 días.
Y si todo apunta a un Servicio las 24 horas, ¿qué queda del fin de año, aparte de la costumbre idiota de que ese día ni los pacos te huevean?
Si seguimos coreando “un año más que se va, un año más, cuantos se han ido, un año más que más da, cuántos se han ido ya” ¿qué tiene eso de nuevo?
¿Qué tiene de nuevo cantar siempre lo mismo?
Tal vez haya un error gramatical, que confunde nuevamente y nuevo, aunque no tengan absolutamente nada que ver uno con otro.
Un año más, que más da, es lo contrario a lo nuevo.
Es más bien la consagración de la mediocridad o de la venganza de los pajeros.
Ayer cometí la idiotez de imaginarme a Tommy Rey haciendo otra cosa de lo que hace siempre y me dio risa la contradicción. Esa que me decía que seguramente cuando esas orquestas ganan más plata es en el último mes del año.
Y me dio risa porque justamente se festeja el año nuevo haciendo siempre lo mismo.
Es más nuevo levantarse con el pie izquierdo que levantarse con la obligación del festejo.
Me pongo a buscar en internet cuál es el mes en que suicida más la gente. Y lo hago pensando en que el sentido común se equivoca cuando habla de la primavera o de los meses en que hay más luz y bla bla bla.
Me pongo a pensar que tiene que ser Diciembre, para apoyar lo que vengo diciendo o aún no dije, y me encuentro con esto:
(RPP Noticias) Especialistas en salud mental del Instituto Guestalt de Lima (IGL) alertaron hoy que en el mes de diciembre se presentan más casos de depresión y suicidio debido a que es la época del año en que las personas evalúan si cumplieron sus metas trazadas o no, además que "la Navidad recuerda a las personas sus problemas económicos, la lejanía o la muerte de seres queridos y las rupturas amorosas".
Podemos decir entonces que si pasamos Diciembre es posible pensar que se viene otro año. Aunque en realidad sólo estemos festejando nuestras contradicciones.
Es como estar en la canción esa de Bersuit que dice: “Tomo para no enamorarme, me enamoro para no tomar”.
Si un año más que más da, entonces no festejamos el año nuevo sino que hay uno menos que festejar.
Y si bailamos coreando cuántos se han ido, me pongo a pensar que en realidad no estamos festejando nada nuevo, sino todo lo contrario.
Estamos festejando la repetición.
Festejamos que hay que pensar en la idea de festejar.
Festejamos que si todos festejan habrá que festejar.
Festejamos la sabiduría que tendrá el año siguiente para hacernos cambiar.
Festejamos que nos envalentona el nuevo calendario.
Festejamos el creernos el “ahora si que si”
Festejamos lo que deberíamos haber festejado antes sin los fuegos artificiales.
Es más, festejamos lo artificial del fuego y poder verlo sin quemarnos.
Festejamos el artificio de la belleza. Eso artificial que se mira al unísono mientras hasta Lavín toma champaña en la calle.
Es como si por 10 segundos un conteo hiciera que todos imaginaran que las cosas pueden ser distintas.
Hay unos que cuando dicen 9.8.7.6 piensan que llegando a 0 se animarán a dar un beso y si les corren la cara podrán echarle la culpa al año nuevo.
Hay otros que ilusionan llegar a 0 y estar en cabo cañaveral o creerse Tom Cruise en Top Gun.
Están los que creen tanto en el cambio del 31 al 1 que escriben todo porque no se puede saber qué pasara.
Están los amargos como yo que tal vez quieran criticar cualquier atisbo de felicidad.
Están los amargos inteligentes como yo de vez en cuando que quieren adelantarse a la idea de no pasarlo tan bien y pueden decir a las 12.01 viste te lo dije.
Está ese gran porcentaje que cuando pasan las 12 está ya tan borracho que no está.
Existe el que utiliza las 12 para decir que va a cambiar o el que usa el cambio de año para mandar todo a la mierda y creer que cambiará por el influjo del 1 de enero sobre sus chacras.
Está el que hace todo con tal de creer que los días siguen transcurriendo igual que siempre y encerrado en su escritorio envidia a los que al igual que el año pasado corean un año más.
¿Qué tiene de nuevo el año nuevo aparte de la agenda?

Wednesday, December 26, 2007

vida a diario



Esto de hoy va dedicado a los que creen que los blogs son el hermano pobre de no tener una tapa en LUN.
Hay una película de w Allen donde todos sus conocidos lo terminan odiando porque sienten que las ficciones que escribe son un plagio de sus vidas y ese plagio termina siendo la posibilidad de que él no lo sea.
¿De qué escribir entonces si no es de lo más cercano?
¿De qué escribir sino es de lo que más te importa?
¿De qué escribir si no es de lo que no logras explicar?
¿De qué escribir si no se trata de meter la mano dentro del frasco?
¿Para qué escribir si tienes las cosas claras?
¿Para qué hacerlo si crees que cuando termines las tendrás?
¿por qué hay gente que confunde tan exageradamente la ficción con la confesión?
¿Por qué te dicen que eres egócentrico si creen no sólo que estás hablando de ti sino de ellos?
Demasiadas preguntas y pocas respuestas porque al fin y al cabo los que le hacían la vida imposible a W Allen creian que él hablaba de ellos aunque no estuvieran sus nombres en ningún lado.
Es así como cierta gente cree que escribir es igual a subir un video de wena natty o que hacerlo es quitarles palabras que debieran haber estado dirigidas a ellos.
Se creen tan importantes que uno no se anima a decirles las cosas a la cara y las pone en un blog.
Se encuentran en metáforas o creen que un adjetivo es su nombre en clave morse.
Te dicen cuando te odian que mejor lo escribas en el blog como si creyeran que el teclado te habla por las noches.
Más bien es al revés.
Una página en blanco no es no hablar sino querer hacerlo y no poder. Sólo ahí la pantalla está vacía.
Sólo esta vacía cuando queremos que no lo esté, sino no existe.
Y aún así esa hoja o pantalla que no tiene nada, dice más que lo que mucha gente garabatea creyendo haber terminado una novela.
En todo caso sólo está en blanco el que quiere decir algo.

Friday, December 21, 2007



Y sí, seguimos en la oda a la pérdida de tiempo.
Y en estos tiempos de blogs no sólo son publicables las estupideces sino que incluso no tienen otredad editorial.
Google analytics me dice que el domingo pasado entraron a este blog 130 incautos.
Hace 9 dias corté el cable y me puse a leer. Primero libros y después el techo.
Y me di cuenta que no era el mismo. Vi el paso del tiempo encima de mi cama y extrañé demasiado el sleep y el zaping.
La cama ya no se movía y la almohada se reía de mi insomnio. Y las cosas empezaban a llamarme y el sueño ya no se medía ni en 30 60 90 o 120 ni menos en 90 60 90.
Las únicas curvas que distinguía eran ovejas acercándose a la plaza diciéndome que el pueblo unido jamás será vencido.
Todo el problema tal vez está en que se han preocupado tanto de los poetas malditos que han dejado de lado a los malditos que no llegan a ser poetas.
Si Neil Cassidy no hubiera sido amigo de kerouac y todos ellos, nadie lo habría conocido.
¿Y que sucede con los Bartlebys que no llegan ni a esa primera vez que los hace renunciar?
¿Qué pasa con los que realmente prefieren no hacerlo?
El otro día vi el documental de cobain y quedé realmente mal.
Hay gente que lo sigue asociando con el grunge pero es sólo porque no se ha detenido a escuchar lo maravillosamente descolgado que ha dicho por todos lados.
Hasta el día de hoy me preguntaba quien eligió la tapa del nevermind y buscando en Internet me entero que fue Cobain.
¿Esa guagua se ahoga o el billete la lleva a la superficie?
¿Nacemos ya vendidos?
¿El dólar es el idioma universal como la torre de babel?
¿Por qué para algunos hacer implica deshacerse?

Sunday, December 16, 2007

....................

nothing no es no thing



(NO) estoy solo…..un reloj en la esquina marca lentamente los segundos mientras corro de izquierda a derecha, descansando sólo cuando pienso (por eso pensar no es trabajo).
Mientras troto, no hay más que un constante ir de aquí para allá, tratando de interpretar a un grupo de furiosas yemas que tratan de sacarse el frío….pero saben que no lo lograrán. Por más furiosas que estén, que griten y se golpeen contra el muro, no terminarán de sacarse el frío…no hay fin, y ese es el problema. Su hombre constantemente piensa en él, en cómo salir de esto, en como irse a pensar( a descansar).

He allí la trampa: el descanso mismo es(¿era?) una actividad. El descanso no puede ser descanso, como el mar no puede ser el mar. Y ellas comienzan a desesperarse, mientras van produciendo incesantemente a su propio verdugo. Miles de verduguitos van apareciendo, y ellas, mientras tratan de descansar, lo único que hacen es producir más trabajo. Las hileras siguen y siguen. El sentido comienza a perderse, y ya no importa(¿importó alguna vez?), pues “importar” es ya en sí un sentido. Entonces “el sentido” precede a todos los demás sentidos, y por ello las yemas furiosas no saben lo que están haciendo: tiene sentido, ¿no?
Y dale. Otro más. Esto ¿terminará? La intervención tiene que ser un sinsentido. El hombre tiene que querer dejar de tener que buscar un sentido, no seguir buscándolo, pues se diluye allí mismo: porque la búsqueda es el sin sentido o mejor aún el pecado del sentido.
Cada golpe contra el muro es un progresivo desgaste de sus cerebros, del cerebro de ese Hombre que cree que lo va exponiendo. ¡Mentira! Lo va perdiendo.
¿Y qué es mejor, buscarlo hasta perderlo, o dejar de buscarlo para así jamás encontrarlo? Puta, Parece que lo he perdido ¿Me podrías recordar que fue lo qué dije?

Saturday, December 15, 2007

bip bip bip



Me río de mí mismo porque reincidir en el blog comienza a tomar un tono medio hood robin y si sigo así entonces mejor me voy a la iglesia.
Vengo llegando a mi casa con una pulsera VIP fluorescente en mi mano que me garantizó vino gratis, patés varios y un sillón muy cómodo.
Eso sí, era un sillón que no jodía a nadie porque estaba al final de todo. Lo que se agradece en todo caso.
Desde el sillón y varias copas de por medio me puse a pensar que esa es justamente la razón de que los VIPS tengan sillones.
Un borracho vip siempre se ve digno en un sillón si tiene la intención de disimular. A uno de la popular se le hace más difícil, sobre todo porque suele estar más iluminado y porque no ha pagado el anónimato del disimulo.
O estás parado o estás en el suelo.
En un sillón vip hasta te la puedes dar de interesante o de aburrido. En el suelo eres casi un indigente.
Otra cosa peculiar es que de un VIP no se puede bajar con la copa.
Tal vez porque los de abajo la utilicen mal o porque pudiera ser un signo que alborote el gallinero.
Yo me pregunto cuál es la diferencia entre una copa abajo y una copa arriba.
Tal vez sea el orden y demás que sí, pero es como si uno al bajar perdiera su derecho al vidrio y tuviera que acostumbrarse al plástico.
Una copa abajo es una posible arma mortal en manos de los que van a pie. Y sé que exagero pero los recitales son cada vez más parecidos a las autopistas.
No discutiré acerca de los VIPS porque a veces me gustan demasiado. El tema no es ese, sino que no hay que confundir una cierta realidad construída a pulso por el mercado, con la estupidez.
Este VIP por lo menos no jodía a nadie a no ser que alguien estuviera pasando hambre y los canapes fueran un tema de supervivencia.
Si uno tomaba vino o se sentaba en sillones no lo hacía por lo menos frente a las narices de nadie ni obligaba a nadie a tener que verme antes que ver el escenario.
Podemos seguir manteniendo la metáfora de la altura y que 20 puedan ver a 200 bien juntitos pero no revueltos, pero si pensamos que hay un escenario de por medio y no nos pegamos la paja de que tal vez esos 20 hayan traido al que está sobre el escenario, podemos pensar que sigue siendo una manera medianamente justa.
Por último, soy un hijo de puta pero no te lo refriego en la cara.
Y me da tristeza que los que a veces hacen las cosas a pulso sean los que más se arriesgan.
Y ahora somos tan modernos que sí, traemos a Iron Maiden, pero sin hacernos cargo de que hace unos años Medina decidió por todos.
Ahora es negocio para los que los traen y no es negocio el matonaje para que no haya lugar donde puedan tocar.
Y a los fanáticos sólo les importa ver a sus ídolos. Sólo les importa pifiar todo lo que se entrometa entre ellos y su fanatismo.
O sea que al fin y al cabo estamos cagados.
El VIP también está abajo si soy parte de la mayoría de la pifia.
El VIP fue el que escupió desde la cancha a Nick Cave para después aullar cada vez que Cypress Hill decía weed. El Vip es cualquier cosa que suene fuerte sea del estilo Chavez o del estilo Lennon y su metáfora de las joyas.
El VIP es el monstruo de Viña cuando da sintonía olvidándonos del que la mide y la sintoniza.
El VIP es lo contrario a la tarjeta BIP. El Vip es in y no trans. El VIP mira de arriba y de afuera. El Vip es privado.
El VIP está en cada uno de nosotros pero eso no significa que nos tengamos que caer bien.

Tuesday, December 11, 2007

SON LAS 9 YO CREI QUE ERAN LAS 3



Y estamos de nuevo acá corriendo las balizas de este blog que estaba muerto pero que igual aún se mueve.
Y la razón es Andrés Calamaro otra vez.
La cuarta para ser precisos.
No venía hace 10 años y lo primero que me llamó la atención fue que no me imaginé tanta gente.
Tal vez menosprecié el poder que tiene la radio.
También vi fanáticos que no conocía.
Y Tenía miedo de con cuál de los Andrés me encontraría.
Sospechaba que el Calamáro del último disco se pudiera calzar esa guitarra de viejo de mierda que a veces seduce a Sabina.
Sabía también que en “la lengua popular” lo volví a escuchar de la manera que me gusta.
Intuía que el piano no tendría mucho trabajo esta vez y que no tocaría son las 9 por ejemplo.
Me di cuenta de esto cuando escuché en el último disco que cantaba en La espuma de las orillas lo siguiente:
”La corriente del río que vino te trajo hasta mi,
Vengo liviano, como la espuma de las orillas,
a contramano de la resaca del carnaval,
mi sentimiento va a durar, el fuego no me va a quemar,
ya no tengo espinas clavadas en el corazón”.
Y duele saber que el Calamaro que más me gusta es el que va en la dirección de la resaca y que tengo que aprender a asumir que el que va a contramano también merece mi respeto.
Me di cuenta ayer cuando se ponía rollinga y lo odié pero al mismo tiempo no fue lo que esperaba y todo bien.
Se lo merece.
Y me vi en la contradicción de elegir entre mis canciones preferidas, esas donde está hecho mierda y suele sentarse solo al piano.
Parece que mientras mejor está, más gente suma.
Y parece que a veces lo quiero solo y hecho mierda.
En Espacio riesco, que bautizaré desde ahora “espacio riesgo para recitales” hubo un momento que de tanta guitarra parecía un recital de G3 o de Steve Vai.
Creo que prefiero esperar a ver que hace en el futuro que quererlo hecho mierda. Por eso quiero a Calamaro más allá del fanatismo.
Más allá del bien y el mal te quiero diría él.
Y le agradezco sentirme bien cuando un día después del recital estoy más afónico que Don Miguel.
Hay amigos que son menos que eso incluso.
Le agradezco hacerme cantar. Le agradezco que muestre una argentinidad que no está al palo.
Le agradezco haberme dado cuenta que el nuevo apartheid lo están haciendo los que lucran con la música.
Le agradezco hacerme querer volver a pìsar la cancha.
Aunque esta nueva cancha separa a los pobres de los ricos. Antes era igual pero por lo menos la cancha llegaba al escenario.
Parece que ahora de tanto MTV, los vips quieren estar cada vez más cerca pero custodiados por los guardias de las 20 y 30 y 40 lucas de mas. Era un chiste ver ese sudor custodiado subido a las sillas.
Las flacas esperando flaca.
Los locos creyéndose locos.
Los que coreaban voy a salir a caminar solito mirándose al espejo. A lo mejor resulta mejor así.
El tiempo pasa nos vamos poniendo menos dice Calamaro y es cierto.
Pasa el tiempo en donde después hay gente que se pregunta por qué Calamaro estaba tan parco. Tan medido.
Pasénle entonces unos binoculares.
Me molesta que se diga eso en el periodismo cuando haga lo que haga el que esté arriba está cagado.
Si se manda el espectáculo del siglo estará dedicado a los de los primeros 50 mts y si no lo hace es un resentido.
El problema de fondo es que al igual que la educación la música también se ha vuelto un servicio de unos pocos. Los demás que mejor miren de lejos.
¿Alguien cree que la gigantesca cantidad de grupos que han venido en los últimos meses es porque de un día para el otro los que ponen plata se despertaron con buen gusto?
Y el que me crea un nostálgico que se vaya a la mierda.
Se trata de que si alguien paga 10 o 17 lucas por lo menos que pongan las sillas de adelante a una altura antiestupidez.
Hubo gran parte del recital que la gente del matadero no veía ni las pantallas.
No se trata de resentimiento. Se trata de que si se van a meter en la lógica del servicio lo hagan en serio. Que sepan que un recital lo mínimo es que suene bien.
Que si no van a dejar entrar botellas de agua que vendan botellas de agua a precios razonables.
Que sepan que no necesariamente un recital tiene que ser un calco del peor Chile de mierda.
No discutiré a estas alturas que tener plata te deje más cerca del escenario pero encima tienen que ponerse más altos? No les basta ya con vivir cada vez más cerca del cielo?
Siempre critiqué el gusto de mucha gente pero ahora me arrepiento. Prefiero que no jodan más. Prefiero que haya recitales para no ir a vitrinear.
O si van a hacerlo no tapen por favor.
Es más, yo creo que varios disfrutaron más de su poder que de Calamaro.
Y si alguno de los que lee recibió un nivea de vidrio en la cabeza por no sentarse que sepa que fui yo y que lo haría otra vez.
Para tener enemigos hay un montón de gente. Corriente.