Monday, April 30, 2007

69 canciones de desamor



8 compases y no te preocupes que te hago todos los temas iguales. Me salto el coro de Under the milky way porque para qué leer el libro si existe la película. Pongo un tema de “Boy de u2” pero después de contar de nuevo 8. No te preocupes que te haré fácil la vida.
Desfiló también new order, depeche mode y 2 segundos que se le deben haber colado de Primal scream.
¿Qué grupo te gusta?
Me gusta café del mar y verve remixed.
Ahhhh bueno, ¿te has dado el trabajo de leer atrás de la caja para saber que no es un grupo?
El pelado de la música colabora justamente borrando ese lado de atrás. Te ahorra todo lo que no sea un incentivo maniático, pero si es así, que por lo menos se dedique a hacer música más que a “modernizarla”.
Es como si para ser políticamente correctos engordáramos los cuerpos de Egon Schielle o transformáramos el grito de Munch en una promesa o una esperanza.
Todo sonaba igual menos los estribillos y encima era chistosisimo que miraba casi todo el tiempo hacia el salón VIP que estaba a su costado.
Los que trabajaban en la barra parecían haber sido drogados con Soma antes de empezar a trabajar. Todo era como esas competencias gringas idiotas de quien come más hamburguesas pero acá se trataba de quien era abducido más por la música.
Si creen que soy un resentido o una mala copia de Charly Brown no entrará en discusión. Una cosa es usar canciones para transformarlas o pensarlas desde otra perspectiva y otra muy distinta es domesticarlas y ponerles bozal para que los VIPS no tengan miedo de que los muerdan.
Mientras pensaba todo esto se me apareció la imagen de Titanic y si este barco se hundiera escucharíamos en vez de Malcovich, Malcovich, Malcovich, Aflec Aflec, Aflec.
Sólo me impidió ver a todos como Aflecc, la diferenciación necesaria para no perderme de contemplar algunas mujeres realmente bellas bailando como si hubieran tomado ayahuasca.
Ni unas que compraban en la caja podían dejar de sumarse al frenesí del baile entretenido que seguían mientras esos árbitros frustrados tocaban el silbato marcando el éxtasis en el que la masa era una sola.
Una pero con el espejo en frente.
Una pero ninguna.

69 torticolis



Que previsible que es uno y cuánto cuesta la risa cuando ya ningún engaño es posible.
Ayer fui el mejor ejemplo posible de responsabilidad por lo que hoy había que responderle con su extremo.
No me río porque ya intuía que sucedería algo parecido sino que me río de lo que al no tener otra palabra mejor le llamaré ñoñez.
Me río de lo ñoño y de todo lo que me hizo escribir esto de madrugada.
Me río menos de que no me di cuenta que todos ya se habían ido y tuve a Buenos Aires de Madrugada sólo para mí.
Me río con más ganas de los Kinder que me invento para hacerle guiños a la bandera. Me río de mis conversaciones para hacer pasar el tiempo y también de mi sensación de no encajar en ningún lado sobre todo cuando quiero hacerme el interesante.
Me río de lo cada vez más descerebrada que me parece cierta música electrónica y de la gente que me ha querido matar en el pasado por cortar las canciones cuando pongo música.
Hoy no quería bailar pero lo habría hecho si los djs no sólo hubieran tenido el disco de 2 many djs y hubieran puesto más de 10 segundos de Prince en esa mezcla con Daft Punk.
Me he puesto a pensar sentado en una escalera cuánto realmente de la música electrónica se sostiene en ese perderse o dejarse llevar o en ese continuo eterno que a veces me parece descerebrado.
Me he puesto a pensar en los que se creen más libres desnudándose en el forestal o prendiendo todas las luces de la habitación cuando les toca liberarse al sexo.
He pensado en la razón de por qué tanto remarcar la libertad en vez de sentirla con lo que tal vez es también el contrario de una luz apagada. De un no empelotarse para hacerlo.
Pienso tal vez para no existir tanto entre tanta libertad discotequera y añoro un tema que me rompa la cabeza y me pregunto que habría sucedido con un Prince enterito.
Pienso en cuanto del aka del dj se pondría en discusión si pone smiths.
Ya se han ido todos y veo desde la barra, con una cerveza y un vaso de agua, como se despliega este adelanto de año nuevo.
Este arrebato neohippie de brazos abiertos que acepta no conocer lo que se baila porque no hay nombre que ponerle pero que es aceptado siempre y cuando sea continuo.
Siempre y cuando la lógica del zapping sea lo más anónima posible.
Esto es el nuevo baile del perrito pero llamémosle el baile del bajito. Mantenme los bmp, ponme en éxtasis no con las canciones sino con esos discos de 17 minutos hechos para hacerte entrar en el caleidoscopio musical.
Hagamos del olvido de la música un cómplice de la borrachera.
Hagamos de la música una experiencia corporal estilo Castaneda.
Hagamos de todo una enseñanza o algo que deje algo y no se pierda.
Hagámosla un puro presente convirtiéndola en deporte.
Bailemos para adelgazar.
Olvidémonos de la casa que estaba antes de ese confortable edificio alfombrado y práctico.
Entremos en la novedad para ignorar la ignorancia.
Démonos el lujo de saltarnos a New order, a Kraftwerk, a Ultramarine, a Wagon Christ. Creamos que Talk Talk es sólo para refritos ochentenos y Human League para recuentos domingueros de cómo eramos.
Lo nuevo es una jeringa intravenosa que funciona sólo como una experiencia que a veces distingue entre lo pasé increíble o estuvo FOME.
No puedo dejar de lado la experiencia de haber contradicho la idea de que coyote ugly era uno de los grados más graves de vomitividad posibles.
Debo decir que el Barman que tenía sombrero de vaquero y se paraba encima de la barra con un silbato en la boca era 100 veces peor que cualquier escena de coyote ugly.
Los que quieran más pruebas de mi fascismo tendrán un regalo.
No logré no relacionar ese momento con esa escena de The wall de la picadora de carne.
No era una barra donde él se movía sino que era una de supermercado donde la propina a dejar era la vida y dónde hasta el sombrero de Cocodrilo dundee me habría parecido de buen gusto.
Yo no trituraría a nadie pero me pregunto si no se habrá equivocado de vocación y debiera haber sido boy scout.
No sé mucho de ellos pero apuesto a que muchos de los ritos se les parecen.
Tienen algo también de Laura en América y observé que suelen mirar al cielo y copiar horrendamente a Patti Smith o a esos bailes altiplánicos que pueden verse en Jim Morrison pero cambiando el poncho por la chaqueta de cuero.
Otra barwomen que vestía una polera de Rancid me decía que ojalá pusieran Rancid mientras bailaba algo con un ritmo más horrible que un remix de Enrique Iglesias.
Si está prohibido fumar debieran prohibirse entonces también estos ataques de vergüenza ajena, que aún no está comprobada su incidencia en el cáncer neuronal.
Sé que nadie me obligó a ir y que si no me gusta tengo la opción de no estar ahí.
Sé también que me la banco y mi reacción sólo tiene forma de escritura.
También sé que si pones un remix de daft punk y Prince debieras poder poner un temita de Prince en algún lado o por último un Daft Punk.
Es como si leyendo a Paul Auster me entero de que un personaje le debe su nombre a Walter Benjamín o a Thoreau o a Melville y si es que me intereso en ellos después olvide las citas.
Es como si creyera que Benjamín, Thoreau y Melville son una invención de Auster.
Es como decir: “ponte la canción de The Cure”.
¿Es más facho decir ponte “la” canción de The Cure o no bailar otra que no sea esa?
Una vez un clon de Paulina Rubio discutió 10 minutos con ella misma que una canción de The Cure no era una canción de The Cure.
Le mostré la tapa del vinilo, le dije qué canción era y para ella The Cure era “Boys don´t cry”.
Yaaaaaaaa….ponte “la de” The Cure.
Yaaaaaaa.ponte smell like teen spirit…
Yaaaaaaaa…..Mr Dando, toquese miss Robinson……
Yaaaaaaaa. Plant toquese escaleras al cielo……
Yaaaaa Mr Black que le cuesta here comes your man……
Yaaaaa Joe, Big audio dynamite es una mierda, toquese rock the cashbah o esa de should i stay……….
No soy yo…….”la gente” lo pide.
Sé que voy a sonar exagerado pero todo esto me suena a ideología de derecha hablando por los idiotas que no pueden hacerlo.
Hablando de lo “Chile quiere” o “la gente” quiere.
La platea pide algo bailable o más bien tarareable.
La “gente” pide un jingle.
La electrónica de hoy fue como un jingle en la radio de Stalin. Larguísimo pero vestido de una elección no staliniana.
Era la estupidez con máscara libertaria. Era un colado gerber vestido de menú internacional.
Era E entonteiment.
Era la insoportable levedad del querer ser.
Y yo encima lo pasaba mal pueden decir los detractores y pueden tener razón.
En todo caso no pido que se acomoden a mi gusto. Sólo digo que son mediocres. Que hacen bailar con puras bajadas y subidas de volumen. Que hay menos riesgo ahí que en un paseo de Bush por la ciudad.
Que hay 2000000 grupos que o ya han hecho eso o que lo están haciendo mejor.
Que el público de hoy es más dócil que un pollo de super pollo y que su goebelismo me parece detestable.
Por suerte Gustavo en la Cigale puso demasiada buena música para dormirme o insomniarme tranquilo.
El club 69 tiene menos posiciones que Juan Pablo II parchando a John Holmes.

Saturday, April 21, 2007

la leyenda del espacio



Los planetas han sacado nuevo disco.
Esa sería la noticia.
Próximamente diré el pronóstico del tiempo.

Friday, April 20, 2007

El hombre es el mejor amigo del perro



Otra vez la queja.
Otra vez el traje del intolerante me queda a la medida.
Otra fiesta perdida en donde las caras felices me hacen pensar en que estoy equivocado.
Otra vez más de lo mismo y otra vez testigo de los pies domesticados de los otros y otra vez pasa que no quiero que me digan qué es lo bailable.
Criticar también es bailar el ritmo del renegado. El ritmo del que se fija demasiado.
No saber qué se quiere bailar y querer hacerlo aunque no se sepa que se baila es fascismo esta vez vestido de snobismo.
implica en general que uno quiere “ser distinto” mientras “los iguales” tienen la repetición de su lado.
Es que siempre ha sido así. Es que esta la bailabamos desde el colegio. Es que tengo “placeres culpables” “Es que perrear la lleva” “ Es que no es mi culpa tener menos cerebro que un perro”.
Es que tal vez Billy Idol tenía razón y cuando decía “dancing with myself” era porque sabía que la receta de la salsa no puede cambiarse fácilmente sin dejarte sin ganas de comer.
Tal vez por eso se quedó perreando solo.
¿Quiere perrear conmigo mi chanchi?

Wednesday, April 18, 2007

es cierto eso de que las generaciones posteriores entienden mas de internet

quise insertar el video de la canción anterior y fue demasiada burocracia.
Acá va el link aunque sea desprolijamente.
http://www.youtube.com/watch?v=REBBpmOZOFA

Friday, April 13, 2007

Una cancion de las que ya no existen




Ça fait des heures que tu l'attends
T'as mal aux os, t'as mal au dos
Tu transpires, c'est pas parce qu'il fait chaud
Et tu trembles, c'est pas parce que t'as froid
Et tu l'attends le salaud
Il prend son temps
Il sait qu'il aura ton argent
Tu ferais n'importe quoi
Pour l'avoir ton petit képa1
Tu voudrais la sentir déja au creux de ton bras
La femme de ceux qui n'en ont pas
Tu le vois venir de loin
C'est ton soleil qui revient
Avec sa sale petite gueule d'enculé
C'est sur que, ce mec-la, il va t'arnaquer
Mais, déja tu flippes2 comme un chien
De peur qu'il te dise qu'il n'a rien
Et quand il tend sa merde avec mépris
Tu vas meme jusqu'a lui dire merci

Tu cours dans une sanisette
Et la pour toi c'est la fete
Et la avec l'eau de la cuvette
Tu prépares ta petite dinette
Et quand enfin tu plantes ton pieu
Dans ton bras devenu noueux
Et que le rouge se mele au blanc
C'est la fin du tourment
Tu la sens maintenant au creux de ton bras
La femme de ceux qui n'en ont pas
Et tu piques du zen3 dans la rue
Et déja tu te souviens meme plus
Qui t'étais avant, du temps ou t'avais des couilles
Ou t'étais fier, du temps ou t'avais meme
T'avais meme des reves
Et tu piques du zen dans la rue
J'ai comme envie de te botter le cul
Mais j'ai bien trop peur de te casser en deux
Tellement que t'as l'air d'un petit vieux
Emmene-la au creux de ton bras
La femme de ceux qui n'en ont pas
Elle est vieille ta femme
Elle est trop vieille pour toi

Sunday, April 08, 2007

falos y felos




Un amigo el otro día comparaba las letras de Colectivo etéreo con Raymond Carver y después de que volvió mi mano del cachamal, me pareció más interesante lo que dijo luego de eso.
No lo cito textualmente porque ibamos por la cuarta cerveza y sería un insulto a sus palabras.
Si recuerdo en todo caso, el concepto de lo que dijo que me parece más interesante.
Dijo que algunas letras se parecían mucho a las de Darren Hayman de Hefner. A lo que agregué que las dos repiten mucho las palabras feo y timidez.
Ahí quedamos, porque si hay algo a lo que me veo obligado con colectivo etéreo es justamente a no clasificarlos.
Me obligan a seguir creyéndome un poco viejo pero me roban las excusas para sustentar mi vejez en una cierta sabiduría porque realmente creo que tienen letras que te obligan a pensar más allá de los facilismos.
Me encuentro con frases como oye carolo julio. Violado a lo belucci. No eres más bacan por morir en la rotonda Grecia o no es tiempo de filosofar si Cancún es más bacan que el Litoral Central.
Colectivo etéreo me gustó instantáneamente. Tal vez porque dicen cosas grandes hablando desde lo que no pueden callar y no cosas grandes queriendo decir cosas grandes, como muchos que sólo me aburren.
Lo bueno de Colectivo es que no caen en el síndrome Benigni queriendo vendernos un discurso de cómo son las cosas, sino que logran hacernos cómplices de la complejidad de lo real y no nos dicen si la vida es bella o es fea. Sólo la describen, tal vez por eso mi amigo los compara con Carver.
Es un hip hop que prefiere vestirse de mujer en vez de agarrárselas. Es un hip hop tan urgente que se ríe de todo de una manera bastante seria. Que no se acomoda. Que se ríe de sí mismo. Que para ser etéreo tuvo que hacerse colectivo. Y que eso etéreo no sea una excusa para ser poco claro. Todo lo contrario.
Dicen cosas muy fuertes pero es difícil encontrar un enemigo que haga de su discurso algo desarmable o categorizable.
Son políticos pero desde lo que su vida tiene de político. Acá sí que el barrio es el barrio pero uno que está dentro de ellos y no ese “in tha neighborhood” prestado, que de ser tan globalizado deja de serlo.
Lo más notable para mí de C.E es que no hay discursos repetidos ni temas “importantes” que hay que decir para ser “profundos” si no que logran todo eso y más, hablando como si hubieran metido el mundo en una juguera con ellos mismos adentro.
Hablan de suicidios pero como si nunca hubieran conocido un discurso oficial más que el propio. Una hemorragia dirigida a una mina y no a lo mal o bien que está matarse.
Hablan con referencias pero no citando, sino siendo, ellos mismos una cita.
Feliz día papá/ te regalaré mi cuerpo suicidado/ luego preguntate qué hiciste mal y que te quede claro/ la vida de los jóvenes es danger danger cuidado.
Cuando haga canciones alegres me llamaré prospegto felo dice Diego en “TQM”.
Hay gente que dice que rapean mal, que tienen poco “flow” pero a mí me interesa más que hablen del sentirse feo que de ser bacán. De croqueras que de joyas. De no saber, que de andar pontificando. Yo no vine a convertir el agua en vino dicen en “avanzando”.
Me interesa que citen a Marley y a Radiohead más que a una lista que va de Este a Oeste.
Este Colectivo va más bien de Norte a sur.

Tuesday, April 03, 2007

Si fuera tu me quedaria en la cama

Esta garganta
Obrera del fuego
Que me arde como llama
Son Llagas porque no llegas ni llamas.
¿Quién más quisiera una garganta consecuente?

NO OLVIDEN QUE ESTO ES FICCION



Siempre quisiste volar y sentir el grito de horror de otros. ¡Este es el momento! No te dejes llevar por tu pobre condición mortal de la que tanto reniegas y acepta que pronto estarás muerto. Es el precio a pagar, aunque tú siempre dijiste que más bien era un placer. ¿Los escuchas? Perdón, ¿Los oyes? ¡Están gritando! ¡Y son carcajadas! Sabes que los ruidos que oyes-Igual que todo lo demás-Son tu propia imaginación. Te estarás preguntando junto conmigo por qué te imaginas carcajadas entonces. La respuesta te debe estar llegando en este momento…..igual que a nosotros. Y te sientes estúpido(nosotros acabamos de experimentar la empatía y provocamos tu envidia). ¿Qué tal ser el objeto de la empatía? No eres el único que puede….te acaba de vencer un estúpido pedazo de papel.
¡Pero sujétame bien! No dejes que el viento me lleve, y termina de leer. No luches con tus compulsiones: Ya no hay vuelta atrás.
Eso te gustaría: Que no hubiera vuelta atrás. Pero me burlé de ti al confirmártelo: me retracto. Sabes que sí hay vuelta atrás. De hecho ni siquiera hay vuelta, pues sigues donde estás y donde siempre has estado.
¿Y dónde estás? En el aire(esa ambigüedad me llegó a dar risa). ¿Y quién te escribió esto? Olvidate de que no era para ti: Por supuesto que era para ti. Si por eso abriste el sobre y jugaste al amigo secreto.
Fue una buena jugada dejar pasar un tiempo, provocando así el máximo de olvido. Quizás con suficiente tiempo, podrías olvidarte de todo el texto y experimentar al máximo el dolor de la humillación, que es el que tanto te gusta(el que más te gusta). La tensión entre experimentación-apuro es la regla: Mientras menos te apuras, más experimentas. Si ahora sientes placer(dolor), te apuraste poco; si el placer es extremo al punto de lanzarte al vacío, te demoraste mucho. Si el placer es poco, el dolor es simplemente aquel del que no te gusta, porque no hay humillación: te apuraste demasiado. Espero que estas simples reglas te ayuden para la próxima vez.
Tendrás que aceptar que tú mismo trazaste esta historia, tú mismo escribiste esta estúpida carta para darte lástima cada vez que quisieras, y cada vez que nadie estuviera ahí para dártela. La perrfecta máquina del dolor. Lo paradójicamente terrible (y lo terriblemente paradójico) es que si se te olvidan hasta las reglas, puedes cometer una locura. Es tenue la línea entre la demora excesiva y la demora excesivamente excesiva.
Esta última puede provocar una tragedia: Puede provocar que de verdad dejes el papel, y la caída se haga cierta. Y entonces, ¿Quién va a jugar conmigo?

no cavo pero si me gustaria o no quepo y si me gustaria



I'm diggin' a grave in the moonlight.
I'm diggin' a grave where we laid.
Hopin' the sun will never come up
And there'll be no compromise again.

We're diggin' a grave in the moonlight.
We're diggin' a grave where we laid.
Hopin' the sun will never come up
And there'll be no compromise again.

ni fords ni blondes



No sé si es peor colgar del teléfono porque no te contestan al estilo THE NERVES o BLONDIE o que te hablen 3 horas y que cuando quieras decir algo, te cuelguen.
Si no hablaste, tal vez te quedes esperando eternamente e inventes excusas para creer en accidentes cósmicos, que son los que le impidieron al susodicho llegar al teléfono.
Tal vez culpes al transantiago.
Tal vez te digan que se estaba lavando el pelo en vez de decirte: le está lavando el pelo.
Y después dicen que el lenguaje no crea realidad.
Siguiendo con los tal vez, tal vez puedas confiar en ellos como en la multiplicación de los panes.
Pero si te cortan el teléfono, es otro el cuento.
No necesariamente peor, pero si más rudo digamos.
Por ejemplo:
Se escucha una difuminación entre la palabra me aburriste y el tono ese BIP BIP BIP del teléfono y no un VIP VIP VIP.
Resulta que cuando el pobre idiota llama a CTC ilusionado con una catástrofe en los cables de Santiago, le dicen que en esa zona no hay ningún problema.
Deberían haber telefonistas que estuvieran entrenadas para contestar por ejemplo, algo así como:
Él problema eres tú y deja de llamar porque no sólo cortas las líneas sino que le das ilusiones a gente que ya se conformó con no tenerlas.
O sea, que el universo le dice que estudie teatro o algo que lo entrene en el cara a cara, porque hasta la teléfonista de CTC, le corta el teléfono.
Si por sólo el gusto de exagerar, pensáramos por ejemplo, que le corta el teléfono una mujer de cualquier línea erótica, estaríamos autorizados a pensar, que más que teatro le vendría bien estudiar una carrera más alternativa.
Estudiar, por ejemplo, esa que enseña los diversos modos existentes para acomodar un cuerpo en un ataúd.
El problema en el fondo es más profundo que un Clos de Pirque.
Lo problematico no es que te corten, ni la posición en el ataúd que incluso ya no podrás cambiar.
El problema muestra los dientes de su gravedad pitbullera en otro momento. Ese donde ya ese gérmen de idiota camino al ataúd, decide volver a llamar y le vuelven a cortar.
Más grave es, cuando no sólo le cortan sino que se las arreglan para hacerlo, sin haberlo dejado hablar.
A ese lo mataría yo si es que no hubiera sucumbido ante semejante hechizo varias veces.
Acá no importa que la intención fuera decir las solemnes palabras de: ándate a la concha de tu madre, o esas aún peores, que dicen:
….pero es que.... mientras son atragantados con un cable peor que el que usaban en El Padrino.
Al fin y al cabo cortar un teléfono no es cortar nada ya que puede decir algunas y más de las siguientes cosas:

Ya no quiero hablar contigo.
Me aburriste.
Ya dije lo que tenía que decir.
Tengo poca plata para pagar la cuenta de este mes.
Mi abuela está enferma pero en realidad es que me salió un carrete mejor que el tuyo.
Los más osados podrían agregar un: y la llevaré a ver si se mejora.
Ya no hay nada de que hablar pero me encanta hablar y ya lo hice.
JAJAJA(disculpen pero esto es mio)
¿Para qué quieres que te escuche si siempre dices lo mismo? Asi que mejor CHAO.
A veces surge un mínimo atisbo de rebeldía que vuelve a llamar y dice si le contestan:
¿Y cómo me vas a escuchar si tú también dices lo mismo siempre?
Es demasiado fácil decir eso si nunca escuchas- dice envalentonado el cabro.
Y remata diciendo:
¿Y si nunca escuchas cómo sabes que es lo mismo?
A los humildes lectores que hayan llegado hasta aca les pido por favor que apoyen a este último cabro porque está pensando en postularse a la alcaldía aunque esté muy joven.
Por último, traten de pensar, que está pensando.

ley o la y es una matona de otra e



Se cae por un rato el miedo a insultar a la poesía.
Se cae una cadera.
Se enfría una caldera.
Se pone un calzón sobre otro calzón.
Una voz cae sobre otra. Ya era hora.
Se cae el tiempo de los relojes ajenos.
Cae la razón y por eso algo de ella se asoma.
Caes y te digo déjate caer porque tal vez, todavía te ataje.
Caes y por si acaso ponte casco.
No digo que yo no caiga.
Pero qué gusto ver que estás con los ojos igual que yo pegados a la pecera.
Caes por tu propio peso.
Y en el epitafio dirá:
Murió preguntando quién la empujó.

Sunday, April 01, 2007

numero equivocado



Espero que bajen 5 discos que nunca pensé que existían, tal vez más que lo que he esperado alguna vez a una mujer.
Suena Daniel Johnston cantando dream scream y entre gritar y dormir decidí escribir acerca de los regalos.
Me molesta profundamente que la gente regale objetos comodines y, aún más, que llegue con regalos que se termina tomando.
Prefiero que se equivoquen y se arriesguen que recibir algo que no ha pensado el que regala sino la masa siútica imperante.
Me han regalado lucybell. Me han regalado lupas, algo que aún no entiendo.
Me han regalado vinos tan horribles que obvio que no me los tomaré yo a no ser que sea una noche homenaje a lebowski o, jugando con la homofonía, a Bukowski.
Una vez incluso me regalaron un disco de Cristián Castro. Vaya a saber uno cómo es que di a entender semejante pérdida de plata. Esa vez no creo haber tenido la culpa.
Me han regalado zipos.
Otra vez, Paulo coelho, por lo que me he vuelto a preguntar si la culpa es mia o es que el que me regala eso nunca ha entendido nada de nada.
También me han regalado un grabado hermoso. Un monóculo increíble. Un cuadro de blow up y otro de taxi driver.
Un disco con 21 temas notables.
Una carta demoledora.
Un baile que podría haber sido más increíble si yo no me hubiera sentido tan torpe.
Pero nunca nadie, me ha regalado algo tan increíble, como esa vez que llegaron con una caja de magnetic fields. Tal vez, en la época más pobre de mi vida.
Había visto esa caja unas 30 veces.
Me la guardaron durante una semana y después de esa semana pasaba casi todos los días a ver si estaba todavía.
Resulta que hubo un día que ya no estuvo y entré a preguntar qué es lo que había pasado y me dicen obviamente, que se vendió.
En esa época yo había conocido una mujer que me gustaba pero que no conocía y cuando empiezo a abrir uno de los regalos que me dio me encontré con esa caja.
69 love songs se llamaba el disco.
Si nos adelantáramos en el tiempo y me lo regalara ahora, seguramente debería ser un sólo disco y que se llamara algo así como:
“Sólo se permite la posición del misionero”.